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El coordinador general asegura que la propuesta de Izquierda Unida, aprobada hoy por el Parlamento asturiano, busca favorecer mayor capacidad de decisión y participación de la gente

El coordinador de IU Asturias dice que "solo los poderosos" sienten miedo porque la ciudadanía tenga más capacidad de decisión

Manuel González Orviz apuesta por impulsar reformas que den el poder a la gente

El coordinador General de IU Asturias, Manuel González Orviz, manifestó esta mañana su satisfacción por la aprobación de la propuesta de reforma constitucional presentada por su formación en la Junta General del Principado con el objetivo de ampliar las materias susceptibles de referéndum así como las posibilidades de que este mecanismo pueda usarse para la derogación de leyes.

La iniciativa, que comenzó a gestarse hace más de dos años y que se presentó formalmente en la Cámara asturiana hace más de uno, es la primera de este tipo que se adopta en un Parlamento autonómico y es de especial trascendencia, a juicio de González Orviz: “Lo que se busca es dar mayor capacidad de decisión a los ciudadanos”.

Arrancada mediante la decisión de la Junta General del Principado la petición de reforma Constitucional, se abre la vía para fortalecer el sistema democrático con un mayor peso de la ciudadanía. “Partimos de una democracia representativa, donde los ciudadanos votan cada cuatro años, a que los ciudadanos, en ese período, puedan decidir a través de las iniciativas, referéndums, etc. Es lo que planteamos, avanzar de una democracia representativa a una democracia participativa, por tanto es importante”.

Manuel González Orviz, respecto al rechazo de las fuerzas de la derecha, resaltó que, a la democracia, “solamente le tienen que tener miedo los poderosos, por la sencilla razón de que la democracia nace para defender los intereses de la ciudadanía, aunque la han subvertido y han puesto los poderes públicos, a veces,  al servicio de los poderes económicos”.

El coordinador general de IU Asturias aseguró que el único fin de esta propuesta y, ahora, del proceso de reforma constitucional que se abre, es lograr que el poder y la soberanía popular recaiga, de forma efectiva, en la ciudadanía. Para González Orviz es imprescindible que se facilite la participación: “que pueda intervenir como así está establecido en todos los asuntos públicos y tenga la capacidad decisoria. Venimos del referéndum escocés y creo que es una buena lección”.