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El pasado viernes, 19 de septiembre, Izquierda Unida de Asturias emplazó públicamente a la Federación Socialista Asturiana para que abandonase su indefinición respecto a la oferta de diálogo que expresaron a mediados de julio. Habían transcurrido casi dos meses y la FSA seguía siendo incapaz de materializarla. La consecuencia era inevitable: no se ofrecía la imagen de seriedad y solvencia que demandan los asturianos y asturianas.

El pasado viernes, 19 de septiembre, Izquierda Unida de Asturias emplazó públicamente a la Federación Socialista Asturiana para que abandonase su indefinición respecto a la oferta de diálogo que expresaron a mediados de julio. Habían transcurrido casi dos meses y la FSA seguía siendo incapaz de materializarla. La consecuencia era inevitable: no se ofrecía la imagen de seriedad y solvencia que demandan los asturianos y asturianas.

En aquella declaración pública, IU también afirmó que el Debate de Orientación Política iba a ser el marco adecuado para que la sociedad asturiana comprobase si el Gobierno de Areces había sido capaz de leer adecuadamente la nueva realidad. Estamos ante una crisis económica que provoca enormes dificultades e incertidumbre para las familias asturianas y los trabajadores. El Gobierno tenía la oportunidad de abandonar la autocomplacencia, el optimismo desmesurado y sus políticas liberales, contribuyendo a facilitar el diálogo en la izquierda.

Una vez transcurrido el Debate de Orientación Política es necesario analizar lo ocurrido. Izquierda Unida trasladó su análisis de la realidad, de lo ocurrido en Asturias en el último año y, sobre todo, fijó sus prioridades políticas para el futuro con el objetivo de dar respuesta a los problemas de los asturianos y asturianas. Como consecuencia, el Grupo
Parlamentario de IU-BA-Verdes presentó 18 propuestas de resolución que contenían algunas de las propuestas políticas que consideramos necesarias poner en marcha en Asturias.

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