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La eurodiputada asturiana homenajeó a Berta Cáceres, Aminatou Haidar, Ahed Tamimi y Milagros Sala, defensoras de los derechos humanos, en el pleno del Parlamento Europeo.

La eurodiputada de Izquierda Unida Ángela Vallina reclamó anoche en Estrasburgo mayor transparencia y claridad en los criterios que aplica la Unión Europea a la hora de financiar o incluso premiar a determinadas ONG y activistas.

En un debate sobre la situación de las mujeres defensoras de los derechos humanos, Vallina homenajeó a Berta Cáceres, Aminatou Haidar, Ahed Tamimi y Milagros Sala, y las puso como ejemplo del tipo de defensoras y defensores de los derechos humanos a las que la UE debería estar protegiendo.

Son "ejemplos de lucha de muejeres que están al pie de conflicto en todo el mundo y que además de ser asesinadas, torturadas, vejadas, e incluso violadas, suelen estar invisibilizadas", dijo Vallina.

Para la eurodiputada, los Estados miembros, la UE y su Servicio de Acción Exterior tienen mucho trabajo que hacer, dijo Vallina. De hecho, "tienen una obligación que emana de los tratados", la de "reforzar su papel como promotora de los derechos humanos en el mundo, protegiendo a los defensores de los derechos humanos y especialmente a las mujeres".

Ahora bien, "financiar a los defensores de los derechos humanos no significa usar esos fondos como una herramienta más para derrocar gobiernos no alineados con los intereses comerciales de esta Unión", advirtió la eurodiputada. "Lo hemos visto en numerosas resoluciones aquí. Países contra los que se pedían sanciones, mientras otros se dejan fuera de la agenda política", añadió.

Vallina exigió más información y transparencia a la UE: "¿Qué hacen ustedes para defender a los defensores derechos humanos?, ¿qué criterios hay para financiar a las ONG y activistas?, ¿cómo se movilizan esos fondos?, ¿De los 1.300 millones de euros destinados a la promoción de la democracia y los derechos humanos, quiénes los están recibiendo?".

La eurodiputada de IU recordó que la UE necesita "una política exterior que defienda los derechos humanos", pero "más que nunca", necesita "trasparencia, cifras, datos y saber qué se está haciendo".