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Ángela Vallina reprocha que la compañía, con beneficios récord, pretenda continuar aumentando ganancias a costa del "sufrimiento" de su plantilla

Izquierda Unida ha pedido hoy al consejero Enrique Fernández que "ponga toda la carne en el asador" para evitar el cierre de Pizza Hut en Gijón, único local de la cadena en Asturias gestionado de forma directa. La portavoz Ángela Vallina, ha reprochado la decisión de la empresa de liquidar este centro toda vez que no responde a una situación de dificultades económicas sino que, por el contrario, la cadena ha registrado beneficios récord. "Le estoy pidiendo que como persona progresista que dice que es que les diga algo tan sencillo como esto: Soy conocedor de vuestra situación y voy a hacer todo lo que esté en mi mano y la de mi gobierno de Asturias para tratar de ayudaros. No le estoy pidiendo nada más que eso y nada menos que eso, señor consejero. Pero tampoco nada menos", ha reivindicado la diputada.

Y es que Food Delivery Brands, empresa de restauración que cuenta con las marcas Telepizza y Piza Hut, registró unas ventas de 297 millones de euros en el primer trimestre de 2022, un 17 por ciento más que en el mismo trimestre del año anterior y un dos por ciento superior a las que tenían antes de la pandemia. Con estos resultados se consolidan, ha explicado Vallina, los que ya presentó el grupo en 2021 del que ha salido reforzado, tanto financiera como operativamente tras alcanzar unas ventas de 1.134 millones de euros, y unos beneficios de casi 50 millones de euros, un 66% más que en el ejercicio 2020, superando las estimaciones comunicadas al mercado, situadas entre 39 y 41 millones.

Con estas cifras, ha señalado la diputada, "no estamos ante la típica situación de una empresa que esté atravesando graves dificultades que amenacen su viabilidad, como creí entenderle de sus palabras el pasado jueves. No. Food Delivery Brands, de la que MIXOR no es sino una filial con la que incluso comparte sede social, es una empresa que va bien. Podríamos decir incluso que va muy bien, a tenor de lo que dicen sus propios informes".

Sin embargo, a pesar de los pingües beneficios, entran en una nueva estrategia de despidos que, además de los 21 de Gijón, supondrá en Toda España más de trescientos, sin otra justificación que la avaricia: "¿por qué se van a cerrar establecimientos que dan beneficios? La respuesta es muy sencilla, y usted la sabe igual que yo: porque los dueños quieren ganar todavía más. Y quieren hacerlo, no mejorando la calidad y por tanto la demanda de sus productos, lo que sería legítimo, sino a costa del sufrimiento de sus trabajadoras y trabajadores. Esto no es responsabilidad social corporativa ni Cristo que lo fundó".

En esta situación, Ángela Vallina ha pedido a Enrique Fernández que, "más allá de sus obligaciones institucionales, no sea políticamente neutral ante una situación intolerable como la que están sufriendo las trabajadoras y trabajadores de Pizza Hut, ni como las que sufren otras trabajadoras y trabajadores asturianos que está atravesando situaciones parecidas. Le pido que ponga toda la carne en el asador en la defensa de los derechos laborales de estas personas"

En las fotos adjuntas, Ángela Vallina al término del Pleno con representantes de la plantilla de Pizza Hut en Gijón, en la escalinata del palacio de la Junta General